junio / agosto
Un festival es como una cumbre. Forma parte de un paisaje, de un sistema, de un tejido. Es un momento excepcional que está conectado con la vida artística de la ciudad, que enlaza con lo que ocurre el resto del año, que sirve de ventana para mostrar todo lo que se ha ido cociendo y que dialoga con su talento, con su ciudadanía y con sus preguntas. Nos gusta imaginar nuestro Grec, más que como una fiesta, como una celebración, un momento esperado, un acontecimiento, un instrumento de reflexión, de cambio y de transformación, un cajón de sorpresas y, sobre todo, una experiencia que hay que vivir. Un Grec popular, apreciado, reconocido, querido, estimulante.